Las entregas y transferencias de pacientes entre unidades, de manera estandarizada, contribuyen al éxito de la atención en salud, pues de esta manera se promueve que la información remitida corresponda a los aspectos claves del paciente que requieren obligatoria transmisión; en los casos en los que se presenten interrupciones en la comunicación, pueden generarse fallas por omisión o desconocimiento de la información, lo cual constituye un factor de riesgo para la atención de pacientes.
Las fallas o alteraciones en la comunicación fueron la causa principal de eventos centinela en Estados Unidos entre 1995 y 2006. Por su parte, en Australia, de 25.000 a 30.000 eventos adversos evitables que condujeron a discapacidad, el 11 % se relacionaron con problemas de comunicación (1).
Promover entregas de pacientes completas durante los traslados a los diferentes servicios mediante herramientas para estandarizar la información, como S.B.A.R (Situación, Antecedentes, Evaluación, Recomendaciones, por las iniciales en inglés de Situation, Background, Assesmment, Recomendations), permitirá brindar seguridad a pacientes y anestesiólogos.
Seguridad como dimensión de calidad
Las estrategias para la mejora en la seguridad se encuentran enfocadas en la eliminación del error, la disminución o minimización del daño al paciente, el fortalecimiento de las barreras mediante la prevención de lesiones, reducción del riesgo y garantía de una adecuada recuperación del paciente. En 2011, la Joint Commissión relacionó las causas más frecuentes de eventos centinela a errores humanos, fallas en el liderazgo y dificultades en la comunicación, habilidades indispensables para el trabajo en equipo (2) (figura 1).
Las fallas en la comunicación se presentan en gran medida por la ausencia o mal uso de canales, privación de la transmisión de la información, malinterpretaciones, omisiones o diferencias emocionales. Dichas fallas pueden ocurrir incluso en situaciones que involucran a personas bien intencionadas.
Según el Ministerio de Salud, dentro de los objetivos nacionales en seguridad del paciente, se incluye la mejora en la efectividad de la comunicación entre proveedores, identificando las necesidades en formación relacionadas con el trabajo en equipo y el desarrollo de competencias en comunicación para el cuidado, supervisión y monitoría de las transferencias (3).
La estandarización como parte de la solución
Es sabido que las transferencias intraoperatorias en anestesia aumentan la morbilidad y la mortalidad de los pacientes quirúrgicos y están asociadas con daño al paciente, el cual se puede reducir mediante la estandarización de la información suministrada (4).
El traspaso estructurado de pacientes conocido en la literatura como transferencia o handoff, que se realiza con el objetivo de pasar información específica de un paciente de forma efectiva, desde un cuidador o equipo de cuidadores a otro, puede ayudar a garantizar la continuidad y seguridad de la atención del paciente (5).
En resumen, los procesos de traspaso estructurados y sólidos son fundamentales para la atención segura del paciente; el uso de listas de verificación y herramientas de software pueden facilitar la transferencia, mejorar la confiabilidad y mitigar el riesgo de omitir información relevante. Cabe resaltar que la estandarización no es sinónimo de la introducción de una lista de control, incluye también la verificación consciente y la firma responsable.
Teniendo en cuenta los datos registrados anteriormente, donde se identifican las fallas relacionadas con comunicación dentro de los traslados de pacientes, una de las soluciones que propenda por la minimización de este tipo de eventos, se presenta como la estandarización de técnicas de información, complementado con una verificación real.
La comunicación como herramienta en las entregas y transferencias de pacientes
La comunicación se define como la calidad y cantidad de información que se remite entre un emisor y un receptor. En los casos de transferencia (handoffs) se podría considerar un emisor y varios receptores. Por su parte, la información brindada se puede manifestar de tipo verbal, es decir, a través de las palabras, ya sea de manera oral o escrita y de tipo no verbal, refiriéndose a los gestos, posturas y microexpresiones faciales.
Cuando se promueven estrategias de comunicación asertiva, el emisor debe garantizar que se informe con calidad, para ello el Team Stepps establece 3 aspectos importantes: audiencia, propósito y ocasión (6).
La audiencia se refiere a la atención prestada por el receptor al emisor, en este sentido la persona que trasmite la comunicación debe garantizar que su oyente esté atento a cada uno de los aspectos que se consideran importantes en la información que se trasmite.
En cuanto al propósito, el emisor debe tener claro el objetivo de trasmitir ese mensaje, para ello, dentro de su esquema mental debe conocer el paso a paso de la información que le llegará al receptor; ejemplo de ello ocurre con las pacientes que se encuentran prontas a dar a luz, el receptor debe verbalizar con su equipo los signos, como la frecuencia cardiaca, la tensión arterial y los niveles de dilatación, con el propósito de comprender si la materna ya va a dar a luz o todavía no.
Finalmente, la ocasión, que se refiere al momento exacto; la información se debe transmitir en el momento oportuno, de lo contrario de nada sirve que se entregue una buena información, si no se garantiza el tiempo correcto, por ejemplo, “Conteo de compresas completo (después de la sutura)”
Handoffs y técnica S.B.A.R
La técnica S.B.A.R se utiliza para la transferencia o entrega de un paciente de manera estandarizada incluyendo información relacionada con su situación, antecedentes, evaluación y recomendaciones para su cuidado.
- Al mencionar la Situación (Situation), es indispensable la presentación de los equipos que entregan y reciben al paciente, así como la definición del momento, ya sea traslado del paciente o entrega de turno. Sumado a esto, mencionar los datos correspondientes a la identificación del paciente, como sus nombres y apellidos completos, número de documento de identidad, edad, entidad prestadora de servicio de salud, diagnóstico y pronóstico esperado.
- El segundo aspecto corresponde a los Antecedentes (Backround) clínicos, quirúrgicos, farmacológicos, psiquiátricos, traumáticos, alérgicos. Así mismo, incluye información relacionada con preocupaciones de seguridad, como antecedentes familiares, creencias religiosas, dolor, sondas, drenajes, vías, estado neurológico, estado cardiovascular, estado respiratorio, estado genitourinario, estado de la piel y otra información que se considere de vital importancia para la seguridad y el cuidado del paciente.
- La Evaluación (Assessment) aborda la valoración de la situación del paciente, los riesgos identificados, los signos vitales actuales, el tratamiento administrado en la unidad, las pruebas realizadas, los resultados de estas pruebas, los pendientes y, por último, los problemas que se hayan presentado y que se deben abordar.
- Las Recomendaciones (Recomendations) corresponden a la información que se debe tener en cuenta para el tratamiento del paciente, incluyendo si se trata de una emergencia o no, cómo llevar a cabo su cuidado, las cuestiones que requieren seguimiento y las acciones pendientes para dar continuidad al tratamiento.
Como información complementaria, es necesario tener en cuenta la importancia de registrar en la historia clínica la entrega de la información mediante la técnica mencionada anteriormente.
De acuerdo con lo observado, se concluye que la estandarización de la información mediante listas de verificación, propende por mejorar la seguridad, minimiza el riesgo de eventos adversos atribuibles a fallas en la comunicación en momentos como entregas de turno o transferencias de pacientes entre unidades. Es de especial relevancia considerar que por sí solas las listas de control no constituyen una herramienta para garantizar la seguridad y calidad en la prestación del servicio. Realizar una verificación consciente, abordando y verbalizando cada uno de los ítems contenidos, le permitirá transmitir, socializar la información y determinar el entendimiento, para evitar errores asociados.
Referencias
- The Joint Commission, World Health Organization. Preámbulo a las soluciones para la seguridad del paciente. Comunicación durante el traspaso de pacientes [internet]. OMS. 2007 [citado 2021 sep. 30]. Disponible en: https://www.who.int/patientsafety/solutions/patientsafety/PatientSolutionsSPANISH.pdf?ua=11
- The Joint Commission: Sentinel Event Data – Root Causes by Event tipe 2004-2011 [internet]. [citado 2021 sep. 30].
- Ministerio de Salud y Protección Social de Colombia. Seguridad del paciente [internet]. 2021 [citado 2021 sep. 30]. Disponible en: https://www.minsalud.gov.co/salud/CAS/Paginas/seguridad-del-paciente.aspx
- Ferrario ME, Scocco E, Barbieri P. Comunicación en el área quirúrgica. Seguridad del paciente. Simposio. 2012;70(1):21-26. [citado 2021 sep. 30]. Disponible en: https://www.anestesia.org.ar/search/articulos_completos/1/1/1434/c.pd
- The Joint Commission Center for Transforming Healthcare. Improving transitions of care: Hand-off communications. Oakbrook Terrace, Illinois: The Joint Commission, 2014. [citado 2021 sep. 30]. Disponible en: https://www.jointcommission.org/-/media/tjc/documents/resources/patient-safety-topics/sentinel-event/sea_58_hand_off_comms_9_6_17_final_(1).pdf?db=web&hash=5642D63C1A5017BD214701514DA00139&hash=5642D63C1A5017BD214701514DA00139
- Agency for Healthcare Research and Quality. TeamSTEPPS®. [citado 2021 sep. 30]. Disponible en: https://www.ahrq.gov/teamstepps/index.html
Excelente tema