El mundo de la medicina en Colombia se encuentra actualmente en constante cambio: se está cultivando el terreno para los primeros pasos de la implementación de la Reforma a la Salud mientras que los médicos se están recuperando de la pandemia que expuso precarias condiciones laborales.
Estas circunstancias imprevistas junto a un sistema de trabajo anticuado de salarios infravalorados (cinco dólares por hora en promedio) y extensas jornadas de trabajo, han afectado a médicos en todo el país. Como resultado, se ha desencadenado un aumento en los casos de depresión y burnout en el personal médico.
Claramente, cada profesional de la salud tiene su propia manera de manejar el estrés, como a través de ejercicios de respiración y relajación. Pero la salud mental no debe depender sólo del autocuidado, es el momento de discutir qué pueden cambiar las instituciones en Colombia, tanto las Entidades Promotoras de Salud (EPS) como las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS), para traer más seguridad a la salud ocupacional.
Voy a abordar la necesidad de crear leyes y contratos más justos por parte del Estado, y las mejoras en indumentaria médica que deben hacer las instituciones de salud.
En cuanto al Estado, en el año 2021 modificaron la jornada laboral semanal a través de la Ley 2101. El Ministerio de Protección Social cambió la jornada laboral de 48 a 42 horas por medio del artículo 161 del Código Sustantivo de Trabajo, con una implementación gradual.
Aunque es un avance, esta disminución de la jornada laboral semanal aplica solo a trabajos regidos por este Código. Es decir, no aplica a contratos de prestación de servicios (OPS), y más del 70% de los médicos en Colombia trabajan bajo OPS. Con la mayoría de los médicos colombianos siendo excluidos por esta ley, es evidente que la normativa debe ser reconsiderada para reflejar la realidad del personal de la salud.
El siguiente punto está relacionado con las IPS privadas del país. Hay una Cámara que representa los intereses de 30 clínicas y hospitales de EPS o medicina prepagada: La ANDI. La entidad promueve la competitividad y hace esfuerzos para mejorar las condiciones laborales debido a la presión para lograr un mejor servicio. Sin embargo, incluso con las IPS Acreditadas incluidas en ANDI, hay un largo trayecto por recorrer, la a acreditación, un proceso de evaluación, demuestra el cumplimiento de niveles superiores de calidad en la atención. Pero estos procesos de evaluación pueden ocasionar estrés y generarle una carga laboral adicional al personal involucrado, sin apoyar su bienestar.
No obstante, hay algunas IPS que han empezado a enfocarse en mejorar la calidad del trabajo y en la retención de su personal, como la Fundación Oncológica Clínica Vida. La clínica implementa apoyos para el bienestar de sus empleados, incluyendo mejor indumentaria médica con los más altos estándares de calidad. Aquí es donde la mayoría de las instituciones se quedan cortas, ya que solo cumplen con lo que exige la ley: la dotación que tienen que entregar tres veces al año.
Invertir en vestuario médico a medida y especializado es algo simple, pero se traduce en trabajadores que se identifican con su institución, se sienten cuidados por ella e incluso, mejor respetados por sus pacientes. Esto conlleva a una mayor satisfacción laboral y efectividad.
Por ejemplo, el 44% de los pacientes según un estudio de la Universidad de Michigan creía que los médicos deberían usar vestimenta formal con bata blanca, y otro 26% dijo que debían usar scrubs con bata blanca. Hay una gran oportunidad—para los servicios de EPS así como para medicina prepagada—de invertir en mejor indumentaria médica para que los médicos estén cómodos, tengan mejor desempeño, y se sientan más seguros y empoderados.
Para concluir, ya sea que el sistema médico esté administrado por el Estado o por empresas privadas, como ocurre actualmente, las instituciones deben considerar seriamente las necesidades del personal médico, por medio, por ejemplo, de mejores contratos y uniformes de alta calidad, entre muchos otros aspectos.
Mientras no exista unión entre los profesionales de la salud; vamos a seguir siendo utilizados, explotados y abusados. Se necesitan varios representantes del gremio de la salud que a consiencia nos representen a nivel político para mejorar las condiciones de todos.